De nada sirve la ayuda externa si no tenemos la voluntad de encontrar la solución dentro de nosotros mismos. Si logramos superar un obstáculo con ayuda externa siempre vamos a tener dependencia y ante una nueva adversidad tenemos que recurrir a otros para que nos ayuden y no siempre vamos a encontrar en los demás una predisposición positiva.
El estímulo y las herramientas para enfrentar las vicisitudes que la vida diaria nos presenta está en nosotros mismos y debemos saber abonar esas cualidades como quien cuida de una planta única y valiosa. No es negativo pedir a los demás opiniones para enfrentar una dificultad, lo problemático es depender de otros para que soluciones los problemas que nosotros debemos solucionar.
Los seminarios, los congresos, los libros, los videos, las publicaciones en diarios o revistas relacionados con la “autoayuda” tiene un mismo norte, estimular a las personas para que encuentren en su interior la potencia y la energía para solucionar problemas o dificultades.
La vorágine de la vida moderna nos presenta nuevas dificultades que debemos afrontar de forma expeditiva para que no se transforme en una problemática crónica. Un organismo con defensas bajas es un campo propicio para que bacterias o microbios puedan desarrollarse generando una enfermedad. Las vacunas preventivas colaboran para que nuestro organismo tenga la información necesaria para rechazar cualquier invasión, de la misma forma debemos potenciar a nuestra mente para que esta sepa resolver los enigmas y dificultades de forma rápida y efectiva
El estímulo esta dentro de nosotros y debemos darle la importancia que se merece porque es el que nos ayudara a resolver los problemas y conflictos.
