Aun que a veces cueste conseguirlo, sonreír es algo que deberíamos de hacer todos a cada hora del día, y aun que se piense que es imposible conseguir un mundo donde todos sonrían en la calle, es posible si cada uno pusiera su granito de arena.
En este artículo queremos decirte como aportar ese granito de arena y hacerte sonreír, algo muy fundamental en la vida.
Podemos ver de dos maneras el objetivo de sonreír, el primero consistiría en aquello que nos beneficia a nosotros. Esta demostrado que el simple hecho de sonreír nos aporta a largo plazo el mismo sentimiento de felicidad, es decir, aun que en un principio hagamos una sonrisa forzada y falsa con el paso de los minutos nos será mas fácil hasta llegar a sonreír de verdad. Esto mismo se aplica a las risas, si empezamos de broma con un grupo de gente es seguro que acabaremos riéndonos de verdad.
En el segundo de los casos, sonreír no solo nos afecta a nosotros como algo positivo, si no que si miras a alguien por la calle y tú sonríes mientras le miras, esta persona tenderá a responderte dicha sonrisa de forma subconsciente. Y aun que se llegase a dar el caso en el que una persona que recibe la sonrisa no la devuelve, esta seguro que estará agradecida o incluso empezará a pensar en porque el no lo está haciendo.
Es decir, por un motivo u otro, ya sea para tu beneficio o conseguir que cualquier otra persona acabe sonriendo, el mantener la sonrisa en la cara es algo bueno, acabas alegrando a los demás y también tu mismo.
Por lo que, en definitiva, un método para quitar tus penas es salir a la calle con una sonrisa bien grande, tu mismo acabaras motivándote por la actitud que llevas y seguro que al ver que has provocado que otra también sonría te sentirás mejor.